Antes de lanzarse al bosque con una cesta para lograr descubrir algo que se nos puede antojar mágico, como son las setas, conoce algunas de las más conocidas que puedes encontrar en nuestros bosques.
El níscalo, la seta comestible más buscada por su buena carne y relativa abundancia. De color anaranjado tiene un perfume afrutado y gastronómicamente ofrece un excelente sabor.
Seta de cardo. Muy fácil de reconocer por su sombrero aplanado en el centro y el color que varía desde el ocre al marrón. Considerada entre las mejores, su carne es muy tierna con un sabor dulzaino. Es fácil encontrarla en los eriales, después de las lluvias.
Seta de los césares. Carne gruesa, compacta, blanca amarillenta bajo la cutícula. Olor y sabor agradables. Se puede encontrar en bosques de coníferas, castaños, robles y bajo encinas. Aparece de septiembre a noviembre.
Boletus edulis, o hongo comestible. Una de las setas más buscadas. Es muy apreciada en toda Europa y ostenta el máximo prestigio y categoría gastronómica. En otoño podemos encontrarla en nuestros bosques de castaños, hayedos, pinos y robles.
Boletus pinophilus o el Boleto del pino, es un excelente comestible, su carne es compacta, blanquecina, de color rosado bajo la cutícula; de sabor dulce. La superficie decorada por una red de mallas blanquecinas. Bola de nieve. Probablemente el mejor champiñón. Carne blanca con olor anisado y sabor delicioso. La podemos encontrar en prados, y en bosque de coníferas, en grupos. Algunas recomendaciones:
El vídeo nos muestra la gran variedad, incluso las venenosas.
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