La mina de Arnao, en la comarca de Avilés (Asturias), es uno de los conjuntos de patrimonio minero más emblemáticos de España. Situada en un privilegiado paisaje costero, constituye la explotación de carbón mineral más antigua de la Península Ibérica, el pozo vertical más antiguo de Asturias y la única mina con galerías submarinas de Europa.
Cerrada en 1915, su castillete de madera, que ha merecido la calificación de Bien de Interés Cultural, y sus galerías subterráneas, con cerca de doscientos años, permiten revivir el ambiente de una mina primitiva.
Visita muy interesante y diferente, incluso para niños. El museo es pequeñito, pero la parte de la visita de las galerías espectacular. Precio 4.5 € . Merece mucho la pena.
Es un pedacito de historia que por suerte se ha recuperado, en un entorno paradisíaco, como tantos y tantos que descubrimos en Asturias, con razón llamada “Paraíso Natural”.