Este es el caso de los paraguas de Águeda, población cercana a Aveiro (la Venecia de Portugal). Esta ciudad de base industrial con cerca de 15.000 habitantes se engalana desde hace cuatro veranos con unos 3.000 paraguas de colores colgados como un manto en el aire, en sus calles. Una invasión de color que en forma de paraguas flotantes, bancos pintados y grafitis en paredes atraen a miles de turistas.
Además de ser un alivio para los paseantes en los duros días del verano, es un reclamo para que los visitantes recorran el centro de la ciudad bajo este techo de colores. Así los comercios de la zona han revivido y han creado un escenario mágico.
¡Una vez más la imaginación nos brinda colorido y belleza!. Podéis contemplarlos en el vídeo que os brindamos en vivefeliz.
Me parece una idea sensacional.