Has oído hablar de Ifrane? y ¿de “la pequeña Suiza”?
Pues ahora te adelantamos que es una pequeña ciudad de Marruecos de marcado estilo europeo y, efectivamente, con cierto toque de similitud con Suiza.
Fue creada por los franceses en la década de 1930, mientras servía como ciudad administrativa para ese gobierno, y debido a su clima se consideró un lugar ideal para los expatriados europeos.
Ifrane es el lugar donde veranea la gente más adinerada del país, el parque de invierno para los ricos de las ciudades de Fez, Meknes y Marrakech, y el destino de esquí más importante de Marruecos.
Dada su altitud, el pueblo está rodeado de árboles y abandona el toque desértico de muchas otras ciudades marroquíes. Considerada una ciudad de alto valor económico (de hecho, aquí está la universidad más cara del país), se puede pasear visitando la famosa escultura del León de piedra, tallado por un soldado alemán durante la Segunda Guerra Mundial en honor al último león del Atlas, y no deja de presentar algunos rasgos característicos de la zona como una mezquita, un mercado público, y otros servicios añadidos tras la independencia de Marruecos. 
¡Ah! Muy importante: una de las ciudades más limpias de Marruecos y libre de delincuencia. ¡Total nada!.