La espuela de caballero (Delphinium) se encuentra entre las plantas vivaces más bellas y más frecuentemente cultivadas. Las flores formadas por pétalos dobles, no emiten perfume y surgen de manera numerosa, reunidas densamente al final de los tallos, formando una especie de gran espiga compacta. La tonalidad, pasa por todo el arco de colores, desde el azul intenso, que por lo general es el más habitual, hasta el rosa, morado, violeta, blanco y la combinación reunida de muchos de ellos.
Se multiplican, sobre todo, por división. Los delphinium son plantas decorativas, que requieren ser colocadas bastante a la vista en el jardín. El efecto más bello se produce con un grupo de tres a cinco plantas o también con un gran macizo, ya sea de la misma variedad o mezcladas.
También es una flor excepcional para cortar. Precisa un gran jarrón, pudiendo combinarse con otras flores, pero los más bellos ramos son aquéllos en los que aparece sola.
Son plantas que requieren un suelo profundo, bien provisto de sustancias nutritivas, un riego regular, que debe aumentarse intensamente durante la estación seca. En cuanto los pedúnculos quedan desflorecidos, se cortan las plantas a unos 15 cm. sobre el suelo; en este caso las plantas vuelven a crecer cuando las condiciones de nutrición son favorables.
Qué cosa más curiosa y qué nombre.
¡Qué flor más bonita!