Hoy viajamos hasta el Castro de Coaña, en Navia (Asturias). El castro era, en esencia, un poblado instalado en una posición topográfica dominante al que sus habitantes dotaron además con defensas casi siempre monumentales, característicos del noroeste de la Península Ibérica (Portugal, Galicia y Asturias).
El poblado celta de Coaña es muy parecido a una fortaleza militar con semblante desafiante y lúgubre. Se alza sobre una loma de 90 metros de altitud, circundada por un arroyo en la parte noroccidental. Se conservan hasta 80 cabañas, hasta alcanzar la gran construcción rectangular que se alza frente a la puerta de la Acrópolis, recinto amurallado que corona la colina
En su interior aún se conservan algunas de las piezas más características del menaje doméstico como los molinos giratorios de mano o los morteros fabricados a partir de grandes piedras graníticas con hasta 4 cazoletas, exclusivos de estos castros ribereños del río Navia.