Chase Hilgenbrinck nació en Illionis en el seno de una familia tradicional americana. Poco a poco fueron descubriendo la emoción e del mundo del soccer (fútbol) y Chase se interesó por apuntarse al equipo del Instituto. Con 16 años fue convocado con la selección americana sub 17 y empezaba a forjarse la carrera deportiva de Chase Hilgenbrinck. Todo apuntaba a que sería un buen futbolista, un futbolista de élite. 
Al salir de la Universidad, Chase no tuvo una oferta en firme de la MLS (Major League Soccer americana) así que decidió probar suerte en la liga chilena. Allí duró varias temporadas adquiriendo experiencia y fama internacional. Fue en el verano de 2008 cuando por fin, le llegó la oportunidad de jugar en su país formando parte del equipo de los New England Revolutions.
Después de 4 partidos con su equipo, Chase Hilgenbrinck sintió la llamada del señor y decidió retirarse del fútbol profesional para dedicarse al sacerdocio: » Siento profundamente que el Señor me ha llamado para convertirme en sacerdote de la Iglesia católica. Mi pasión ahora es hacer la voluntad de Dios, que es querer solamente lo que Él quiere para mí».
Después de varios años en la Iglesia Mount St. Mary, el ex futbolista no se arrepiente de la decisión tomada y en sus ratos libres sigue echando algún que otro partido en el equipo de Mount Saint Mary University.
Lo curioso de esta historia es que él podía estar disputando el Mundial de Brasil 2014, ¿estará siguiendo los partidos de la selección de EE.UU en el Mundial de Brasil?
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Admirable que todavía quede gente así.
Mira que es guapo !!!!
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