El doudou o dudú es una palabra de origen francés que viene a usarse como algo cariñoso. En realidad se trata de un pequeño trapito blandito, de tela aterciopelada con la cabeza de un muñeco, que muchos bebés utilizan al dormir. Suaves y blanditos, los cuatro extremos pueden ser con nudos o sin nudos, rectangulares, cuadrados, pero eso sí, siempre planos. Existen una gran variedad de modelos, colores y texturas que aportan al bebé la tranquilidad y que necesitan.
Está pensado para ayudar al bebé (en algunos casos, no tan bebés), a conciliar mejor el sueño, pues el truco consiste en impregnar el dudú del olor característico de mamá o papá para que durante la noche, aunque duerma en su cunita o en la cama, se sienta reconfortado como si estuvieran los papás a su lado.
Por eso, dada la dependencia de algunos peques al dudú, suele ser buena idea tener más de uno: en casa, en la casa de sus abuelos, en la guarde, etc., pues si se encariña puede pasarlo mal si le falta. Está comprobado que, en algún momento, al crecer, dejará de necesitarlo
ues al dudú, suele ser buena idea tener más de uno: en casa, en la casa de sus abuelos, en la guarde, etc., pues si se encariña puede pasarlo mal si le falta. Está comprobado que, en algún momento, al crecer, dejará de necesitarlo.
Muy bonito, incluso el vídeo.
Cierto! Mi hija tiene uno de estos del que no se separa nunca.
Gran artículo.